Padre Nuestro: Esto nos da su paternidad y quiere decir que Dios es nuestro Padre y podemos acercarnos y tener confianza con Él.
Santificado sea tu nombre: Nuestro Señor tiene muchos nombres en la Biblia y debemos entrar a su presencia de esa forma.
Vénganos tu reino: El reino de Dios es servirle, es estar dispuesto a hacer algo por las personas.
Hágase tú voluntad: ¿Cuál es la voluntad de Dios para nuestra vida? Si no conoces cuál es la voluntad de Dios para ti, será muy difícil que la hagas. La Biblia nos habla claramente de la voluntad de Dios para nosotros.
El pan de cada día: La Biblia nos dice que no sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. El pan de cada día es la porción de Palabra que necesitas, ahí puedes pedir lo que necesitas; por ejemplo, si te va mal en el negocio, puedes decirle a Dios que quieres la bendición material. En los momentos en que estás a solas con Él, Dios sabe qué palabra necesitas y te va a ministrar y hacer cariño como su hijo que eres.
Perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores: Tenemos que saber perdonar. En esta parte está el perdón y el carácter de Jesucristo. Si deseas imitar a Jesús, debes perdonar porque Él nos ha perdonado por todos nuestros pecados. Debemos aprender a perdonar, Jesucristo nos dio ese gran ejemplo.
Líbranos de tentación: Esto es algo que constantemente tenemos que estar peleando y luchando delante de Dios. Ahí puedes decirle a Dios que te libre de la tentación, que te aparte del hombre malo y la mujer mala, que te ayude a no hacer negocios malos.
El reino, el poder y la gloria: Ahí hay tantas cosas que podemos hablar con Dios en un cuarto, y cuando uno se da cuenta, ya pasó como media hora.